miércoles, 3 de octubre de 2012

Shakira y Piqué, donde criarán a su primer hijo


 siempre ha sido simpática con la prensa. Es difícil ver a la cantante sin una sonrisa en la boca, a pesar de que los paparazzi le siguen allá donde va. Pero esono significa que no le importe que salga a la luz su intimidad. Lo hemos comprobado durante los primeros meses de su embarazo, tiempo durante el cual ni ella ni su novio Piqué han abierto la boca para desmentir o, a pesar de la evidencia, confirmar el rumor.
Lo han hecho cuando ya no quedaba más remedio y la barriguita de Shakira comenzaba a asomar. Pero no ha sido más que un breve comunicado en su página web, y todo apunta a que a partir de ahora mantendrán silencio hasta el día del juicio final. ¿Por qué lo sabemos? Porque van saliendo a la luz los estrictos contratos de confidencialidad que la pareja va obligando a firmar a todo el que tenga que ver con ellos.
Acaba de hacerlo con la clínica barcelonesa de Teknon, donde asistirán a la colombiana durante el parto. El personal sanitario, incluidas las enfermeras, no podrán decir ni ‘mu’ acerca de nada que tenga que ver con la cantante, según ha publicado la revista Vanitatis. Pero no son los únicos trabajadores que tienen la boca cerrada con cremallera.

La mansión de Shakira y Piqué

La publicación tiene todos los detalles sobre la nueva mansión de Shakira y Gerard Piqué. Y ello a pesar de que los albañiles también han tenido que firmar un contrato de confidencialidad. Si hablan, les echan, han declarado a la revista Aún así, Vanitatis ha conseguido sonsacarles que el nidito de amor donde crecerá ‘Piquetín’ no estará listo hasta marzo del año que viene.
Y es que, con el dinero que tienen, mira que se han complicado la vida. La elección ha sido una mansión de 700 metros cuadrados que más de una decena de obreros deben derribar y volver a construir. Con el afán de preservar su intimidad, también han comprado la finca contigua. Además contarán con personal de seguridad, cámaras de vigilancia y todo lo que haga falta para que nadie interrumpa su privacidad.
No es para menos. Escarmentados están después de que sus exempleados les chantajeasen con difundir un supuesto vídeo sexual de la pareja en un yate.

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